El otro día llegó a mis manos una pequeña "reliquia" que me encantaría decir que es familiar, pero lo es y no lo es...
no lo es porque los protagonistas de esta historia no tienen nada que ver
conmigo (o sí quien sabe!!!!) pero llevan tanto tiempo en mi familia que claro
ahora lo siento como si fueran algo mío, quizá por eso no puedo resistirme y os lo tengo que contar...
Os pondré en precedentes:
Con mi mirada de asombro, mi padre me regalo una pequeñita caja, muy muy sucia y muy muy
vieja... y me contó que esa caja se la regaló un amigo, que pensaba que, como a él le gustaba la fotografía, haría algo con ello.... esta caja misteriosa contenía una serie de negativos
sobre cristal. Mi asombro fue instantáneo, de entrada me parecía imposible que un negativo fuera de cristal... y aún me parecía más imposible que mi padre fuera dueño de algo taaan "valioso" y yo me enterara ahora....
Mi necesidad de saber más, me llevo a sumergirme, una vez más en las profundidades de la red.
He aquí mi sorpresa: Esta técnica se desarrolló en la década de 1850 a 1860.
Esto quería decir que los negativos que tenía entre mis manos tenían ni más ni menos que alrededor de 160 años!!!!!!!!!!
Llegados a este punto, mi interés de poder "ver" (o mejor dicho, positivar) esos negativos
fue primordial... Lo único que podía hacerle era una foto, iluminando adecuadamente el negativo.. así quedaría digitalizado... y a ver que podíamos hacer....
este fue el resultado:
Ante todos ustedes.... una foto que tiene 150 años!!!!!
Ahora el suponer una historia, de estos chicos y de toda su familia, solo sería coser y cantar,
si supiera escribir...
:D
